La India está habitada por 1357 millones de personas, 28 estados y 8 territorios que se expresan en más de 1652 dialectos de varias familias lingüísticas, entre ellos el bengalí, que es hablado por 260 millones de hindúes. De la emigración de algunas familias de esa cultura trata ese libro, de la integración o la inclusión en el mundo anglosajón y en el sentimiento haber perdido el origen sin alcanzar plenamente el destino y acabar viviendo en una especie de tierra de nadie.
En todo caso la percepción de pertenecer a una biología determinada, nace de una amarga experiencia, habitar en un sistema alimentado por una estrella agonizante. En ese tiempo se constata que, en el cosmos, casi todo tiene un final.
Dentro de un tiempo Sol crecerá hasta devorar a la mayoría de planetas que orbitan alrededor y Tierra será el tercero en resultar abrasado e incorporado al mecanismo nuclear de la estrella.
Entretanto habremos de esforzarnos para superar de forma individual las dificultades añadidas que acompañan a cualquier clase de mudanza e insisten en resaltar las diferencias por mínimas que sean.
Bajo esas circunstancias ignoro sobre cual justificación se sostendrán las creencias de que hay un cielo reservado para disfrutar de una vida eterna en la exclusiva compañía de correligionarios, compatriotas, colegas, practicantes de yoga, vegetarianos, veganos, animalistas o vaya usted a saber cuales demandantes de cerveza en el idioma de nuestra preferencia.
Porque vaya mierda de paraíso nos espera si no hay previstas terracitas con sombrilla, ni partidos de fútbol para la tarde de los domingos!!